Bienvenidos Terricolas.

Han atravesado el portal valientes viajeros... No es un mundo paralelo, no es un universo desconocido. Es simplemente una instancia para pelusiar...
ADV: ¡CUIDADO! Algunas pelusas pueden resultar peligrosas.

*Pelusiar: las pelusas todo lo ven y todo lo saben, es imposible escapar de ellas, porque cuando menos lo esperes ahí estarán para dar su golpe maestro. El tamaño no es lo que importa...

sábado, diciembre 01, 2007

CDA en su cruzada por los Derechos Animales


El Cierre del bioterio de Universidad Católica;
La derrota de un gigante.



El pasado 8 de Agosto, el activista por los derechos animales Crístian Apiolaza, fue llamado a juicio a causa de las querellas imputadas en su contra por la Pontificia Universidad Católica. Según las acusaciones, Crístian habría instigado a un grupo de animalistas a ingresar al Seminario de Neurociencias realizado en Mayo del 2006, para interrumpir con gritos y manifestaciones. Sería además el autor material del bombardeo de pintura roja contra el frontis de la Facultad de Ciencias Biológicas de la UC en Junio del mismo año. Durante dos días y varias horas, los abogados de la PUC armaron una comedia teatral para justificar sus querellas; acusaron a la web del movimiento No Más Vivisección de incentivar la lucha frontal y trataron a los integrantes de la CDA de terroristas y delincuentes. Los activistas presentes debieron hacer un esfuerzo por contener la risa frente a estas acusaciones. En la defensa, el desempeño voluntario del abogado Andrés Villablanca fue impecable. Al final, Crístian Apiolaza fue absuelto y declarado inocente.

Lo cierto es que la PUC ha tenido razones de peso para temerle a Apiolaza. En el año 2003, el activista ingresó al bioterio de la institución como empleado de aseo, luego de que un cercano le informara que buscaban a alguien para el trabajo. Casualidad o no, la oportunidad resultó perfecta para confirmar los rumores de que al interior del laboratorio se realizaban brutales atentados a los derechos animales de los primates internos. Crístian se presentó sin dudarlo y quedó. Acto seguido, se encontraba dentro con cámara en mano, filmando las crueldades y los abusos a los que los animales eran expuestos. Fotografió las condiciones de mantenimiento e incluso fue testigo de documentos que revelaban experimentación innecesaria y repetitiva. El material fue publicado en algunos medios, y hasta se hicieron reportajes al respecto, pero al poco tiempo muchos se olvidaron del tema. Sin embargo, el material captado al interior del bioterio es hoy la principal base de fundamentos reales que tiene No Más Vivisección para derrocar al gran vivisector que es la PUC. NMV es una de las campañas más importantes en Chile bajo la tutela de la Coalición de los Derechos Animales (CDA).

La CDA nació en el 2005 como resultado de la unión de diferentes agrupaciones, todas defensoras de causas animales, y frente a la necesidad de formalizar su situación para obtener permisos y organizar protestas. Se divide en varias campañas enfocadas en las causas más urgentes. Esta forma de actuar a través de células específicas ha sido adoptada con anterioridad por varios movimientos animalistas en todo el mundo. Las campañas se componen de grupos independientes y especializados, conectados todos a través de una red de información clandestina, y unidos por una lucha en común; abolir la explotación y el abuso animal. Pero como la experimentación en animales sigue siendo hoy una práctica legal, no es mucho lo que se logra denunciando a los vivisectores ante las autoridades. Por eso es que la CDA y sus campañas han optado por la denuncia pública. No es extraño encontrar activistas de la coalición en pleno centro capitalino repartiendo volantes, conversando con los transeúntes, promocionando tocatas y vendiendo chapitas. De esta manera no sólo informan a la gente, sino que también logran recursos para su propio financiamiento.

Sin lugar a dudas, No Más Vivisección es una de las campañas más duras y efectivas de la coalición. Enfocada principalmente contra el bioterio de la UC, organizan dos protestas semanales en las que despliegan sus lienzos y pancartas, reúnen firmas y gritan a todo pulmón durante horas. El movimiento no supera los 20 activistas, pero ha logrado reunir hasta mil participantes durantes sus manifestaciones. La idea es aprovechar sus derechos ciudadanos de libre expresión y protestar sin recurrir a la violencia para evitar darle a la UC excusas para recurrir a Carabineros. Y si bien existen otras escuelas (como la Universidad de Chile, la USACH y la Andrés Bello) que experimentan también con animales, el bioterio representa la peor amenaza de todas puesto que con frecuencia realiza préstamos y donaciones de primates y otras especies a estas instituciones.

En la actualidad, alrededor de 90 monos capuchinos son mantenidos en jaulas al interior de este edificio y utilizados para experimentos con fines ginecológicos y neurocientíficos. La “píldora del día después” cuenta entre los medicamentos abortivos y anticonceptivos testeados en estos animales. El propio Crístian Apiolaza debió barrer del suelo los fetos abortados de monas utilizadas para experimentación. También es común que se modifiquen las condiciones de vida en que se mantienen a los primates; se les priva de comida, agua y hasta sueño. Aseguran informantes que en ocasiones incluso se les aplican golpes eléctricos. No son sólo primates los que sufren al interior de este recinto; también se mortifican con experimentos miles ratones, perros y gatos, muchas veces recogidos directamente de la calle. Aún así, las autoridades del bioterio se empeñan en asegurar que sus animales se encuentran en las mejores condiciones. Pero el escenario se encuentra próximo a cambiar; la Universidad Católica ha asegurado que cerrará el bioterio y los trámites deberían estar listos para finales de este año. Los simios serán enviados al refugio de primates Monkey World en Inglaterra. Si bien los activistas de la CDA se encuentran celebrando este hecho, sin lugar a dudas preferirían que los animales fueran enviados al Centro de Primates de Peñaflor, a sólo 20 kilómetros de Santiago. Esto significaría una mancha en la imagen de la UC imposible de ignorar.

Miles de empresas reconocidas a nivel internacional han admitido públicamente que experimentan con animales, o que al menos le pagan a otras más pequeñas por hacerlo en su lugar. Algunas de las que han causado mayor controversia son Procter & Gamble (dueño de marcas como Always, Ariel, Duracell, Gillette, Oral B, Pampers, Pantene, Pringles, Wella y hasta Iams, productor de comida para gatos y perros), Nestlé (Purina Petcare, alimento para animales), Colgate, Palmolive y Mars (dueño de Whiskas y Pedrigree). Pero sin duda, los vivisectores más importantes y obstinados son las compañías de cosméticos. Tal es la cantidad de empresas de este tipo que practicas la vivisección, que resulta más fácil mencionar aquellas que no lo hacen en lugar de las que sí; Nivea, Avon, Oriflame, Lush, Yves Saint Eves, entre unas pocas más. Las compañías de dentríficos son también fuertes vivisectores, salvo algunos laboratorios como Knop que han creado pasta de diente en base a productos homeopáticos. Pero la dura realidad es que el hecho de experimentar en animales previamente a lanzar sus productos al mercado, les concede a las compañías cierta inmunidad legal en caso de que se produzcan efectos inesperados en humanos.

Sin embargo, contrario a lo que se puede creer, no todos los laboratoristas se empeñan en defender la vivisección. Han surgido grupos de científicos que luchan en contra de estas prácticas e incluso se preguntan cómo es posible que la ciencia haya logrado evolucionar a pesar de la vivisección. Y es que el testeo de medicamentos en otras especies ha tenido en ocasiones resultados devastadores para los seres humanos. Tal es el caso de la talidomida, que fue probada en animales de laboratorio antes de ser lanzada al mercado. Puesto que los especímenes tratados no mostraron ningún tipo de efecto secundario, no pasó mucho tiempo antes de que se comenzara a utilizar el medicamento en humanos. El resultado fue desastroso; miles de madres que habían consumido talidomida dieron a luz a niños con serias malformaciones físicas. Otro caso capaz de poner en juicio la efectividad de la vivisección es el de la penicilina. Tras observar sus efectos sobre bacterias en vitro, Fleming decidió probar el medicamento en conejos. Éstos no presentaron mayor reacción ante el tratamiento. Sin embargo, años después y como último recurso para salvar a un paciente, el científico decidió probar la penicilina en humanos. ¿Qué habría ocurrido si Fleming hubiera descartado el medicamento a causa de los primeros experimentos en conejos?

Por fortuna, ya han comenzado a tomarse medidas en contra de la vivisección alrededor de todo el mundo. En Inglaterra, se aprobó una petición hecha al parlamento por activistas que exigen una evaluación real y objetiva de los verdaderos beneficios que la experimentación animal ha traído a la ciencia. Pero lo que realmente ha marcado esta batalla entre vivisectores y animalistas es la constante evolución de los métodos de lucha, formas de actuar y resultados que jamás se pensó que llegarían a darse. Tal es el caso de SHAC, un movimiento británico enfocado en darle la pelea a HLS (Hauntingdon Life Science), un importante laboratorio internacional acusado de crueldad y abuso contra los animales que utilizan para testear sus productos. Incluso aparecieron en televisión grabaciones en las mostraban a los trabajadores golpeando y burlándose de cachorros beagles utilizados para experimentación, algunos demasiado pequeños aún para ello. Luego de la controversia generada, SHAC optó por recurrir a una nueva estrategia, un boicot masivo e indirecto saboteando todos los recursos para la subsistencia de HLS. Se destruyeron varias de sus instalaciones eléctricas y servicios de transporte. Se resolvió además atacar a las empresas asociadas a HLS; tanto sus clientes como sus proveedores de servicios pagaron el precio de ser cómplices de un vivisector a nivel mundial. Hoy, HLS debe millones en deudas al Gobierno y se ha imposibilitado su inversión en la bolsa de comercio. Más de 100 compañías han renunciando a trabajar con ellos y las que aún lo hacen se enfrentan a diario con activistas indignados que llegan hasta los hogares de los dueños a protestar. Algunas empresas que trabajan con HLS son: Novartis, GSK (GlakoSmithKins), Actelion, Torrey Pines Therapeutics, etc.

En Chile, la CDA ha cumplido con su parte del asunto. No sólo ha dedicado una de sus campañas más destacadas a combatir la vivisección, sino también numerosos movimientos enfocados en otros temas y que han logrado resultados muy satisfactorios. Cada día, poco a poco, se gana algo de terreno. En nuestro país, los perros abandonados son una de las principales causas a tratar. A diario se encuentran animales acuchillados, atados al cuello por alambres que los estrangulan, y hasta violados. Ante las quejas de las vecinos, varias comunas han optado por la solución más fácil; la eutanasia masiva. Coyhaique, Puente Alto y San Miguel han ignorado las propuestas de la CDA y tomado sus propias medidas de eliminación; tal como lo aconsejó el Ministerio de Salud en su llamado a las comunas a hacer lo que estimen conveniente frente al tema. Pero la eutanasia no sólo involucra abuso y crueldad, sino que además no constituye una solución efectiva a largo plazo. En cambio, la esterilización masiva propuesta por la CDA significa concluir con el problema de raíz. Para ello se abrió la Clínica Veterinaria Trinidad, en la que se esteriliza a bajos costos y se prestan otros servicios gratuitos. Varias comunas se han sumado a esta causa. El alcalde de Santiago, Raúl Alcaino, impulsó en su comuna un programa de esterilizaciones masivas y prohibió la eutanasia de animales vagabundos por parte de la Municipalidad.

La historia de Toto, el chimpancé, cuenta también entre los triunfos que la CDA ha logrado concretar. Toto fue traído ilegalmente a Chile por el circo Los Tachuelas y mantenido en cautiverio durante 24 de sus 27 años de vida. Cuando los activistas lo descubrieron, fueron testigos de las brutalidades que los circenses habían llevado a cabo con el animal; estaba castrado, le habían cortado los dientes (por lo que desarrolló graves infecciones bucales) y tenía quemaduras en todo su cuerpo, ya que parte de su show consistía en fumar cigarrillos frente al público. Luego de perseguir a Los Tachuelas durante meses, finalmente se logró decomisar a Toto y enviarlo a un refugio natural en Chinfunsi, Zambia. Pero el chimpancé se encontraba en tan malas condiciones que fue imposible reunirlo con otros de su edad, ya que su deterioro le habría significado ocupar el lugar más bajo en la jerarquía del grupo. Incluso podrían haberlo matado. Hoy, Toto convive con los primates más jóvenes, y se ha convertido en nada más y nada menos que el líder de los pequeños.

Lamentablemente, la crueldad de los circos y el abuso con sus animales no han disminuido ni en lo más mínimo. Hace unas pocas semanas, trabajadores de Los Tachuelas sacaron a la elefanta Ramba a la calle para pasearla entre la gente, subir niños a su lomo y burlarse así del grupo de protestantes que se encontraba presente en aquel momento.

Por fortuna, aunque poco a poco, la percepción del mundo hacia la importancia del respeto y la protección de los derechos animales ha comenzado a cambiar. Movimientos como la CDA rescatan la participación de la gente común en esta batalla. Insisten en la importancia de informar a los ciudadanos sobre lo que realmente ocurre en las peleteras, los criaderos masivos, los laboratorios y hasta en los circos. Los activistas han logrado dejar atrás prejuicios y estereotipos, para convertirse hoy en combatientes con fundamento real y un objetivo común; cultivar el respeto y la empatía entre las especies. Como seres humanos y hermanos mayores, es nuestra labor proteger a los más débiles en lugar de utilizarlos para beneficios inútiles e innecesarios. Cuando nosotros sufrimos, nos quejamos. Que ellos no puedan hacerlo no significan que no estén sufriendo.


BGJ.

lunes, noviembre 19, 2007

Maldita Farándula; "Sálvese quien pueda"




Desde sus orígenes en la crítica política durante los años de la dictadura, hasta su labor actual como panelista de programas de cotilleo, u “opinóloga” como ella misma bautizó su nuevo rol mediático; Pamela Jiles se ha encargado de criticar, analizar e invitar a debatir al público espectador. Y es que después de los sucesivos despidos que debió enfrentar a causa de su imagen quizás demasiado política para la televisión actual, la invitación a incursionar en Farandulandia fue una de las pocas oportunidades de permanecer “al aire” que le estaban quedando.

Hoy sin embargo, Pamela Jiles se enorgullece de su participación en el mundo de la farándula. Asegura que su nuevo escenario constituye un espacio de politización tan factible como cualquiera de los otros espacios abiertos por los medios. Incluso ha visto necesario y oportuno dedicar todo un libro a este tema; su última creación, Maldita Farándula. No es de extrañarse, siendo que tres cuartas partes del itinerario de la televisión y la radio actual, son dedicadas al famoseo y su pelambre respectivo. Lo singular del asunto es que ya no sólo son futbolistas y modelos quienes se enfrentan en un intento de acaparar la mayor atención posible de parte de los medios. Políticos y empresarios se han sumado a esta batalla. Tal como lo dice Pamela en su libro, “…sienten que no existen si no están en los medios faranduleros”.

Maldita Farándula habla en parte de la transición que han enfrentado los medios desde los años de la dictadura, pasando por una época de aprendizaje democrático, hasta el mundo en que vivimos hoy. Los llamados “estelares” de finales de los ’80 y a lo largo de los ’90, aquellas representaciones utópicas de una sociedad agotada e impedida por la censura, han sido reemplazados por la práctica de la opinología y sus derivados, en un intento por retratar y juzgar la verdadera realidad chilena. Las masas han dejado de actuar como meros espectadores, y se han abierto paso en la opinión pública mediante este nuevo fenómeno que es la farándula, y a través del cual se transforman las relaciones de poder entre los medios y los espectadores. Ya no es el público quien debe adaptarse al contenido y a la programación que las grandes cadenas televisivas deciden poner al aire. Por el contrario, el enorme crecimiento de la oferta mediática (más canales y nuevos programas) ha conllevado a que hoy sean los medios quienes compiten por satisfacer las exigencias del espectador en una desesperada lucha por mantener el rating y subsistir.

En su Diccionario de la Farándula Chilena, Maldita Farándula se encarga de nombrar a todos aquellos individuos que han hecho lo imposible por darse a conocer y mantenerse reconocidos por las audiencias mediáticas. Empresarios, políticos, modelos, animadores, deportistas y incluso parlamentarios y ministros; parece ser que de este listado no hay quien se salve. Pamela Jiles confeccionó una lista de 198 personajes, incluidas parejas famosas, ella misma y hasta la Presidenta, y agregó además una aguda y deslenguada descripción de cada uno. Lo mismo con otros tantos rostros que integraron la farándula de la dictadura y las cuatro divas chilenas de todos los tiempos, mujeres que el público chileno ha querido enaltecer y humillar.

Lo que destaca de Maldita Farándula es su valentía y originalidad. Uno de los pocos y primeros libros en su especie, seguramente se convertirá en el predecesor de muchos textos de cotilleo que vendrán en el futuro. Considerado como un libro recreativo por muchos, ha tenido una buena acogida por el público de masas. Sin embargo, creo que el mensaje de Maldita Farándula ha sido malinterpretado, y que en realidad esconde un contenido y un significado más profundo del que se le ha dado. Más allá de sus comentarios agudos y descripciones irónicas, el libro de Pamela Jiles se encarga de sacar a relucir una importante verdad presente en la sociedad chilena; y es que hoy somos valorados más por nuestra carta de presentación que por el discurso real que buscamos comunicar. La evolución y éxito de la temática farandulera es la viva prueba de esta nueva forma adoptada de evaluar y juzgar al individuo.

El pasado 6 de julio, cuando la editorial Catalonia y Pamela Jiles decidieron lanzar al mercado a Maldita Farándula, realizaron además una invitación pública a debatir dirigida a todos los integrantes de la sociedad chilena. Creo que es responsabilidad de todos responder a esta invitación.






B.G.J.

jueves, noviembre 15, 2007

DON MIGUEL: Jamás una advertencia gráfica había tenido tanto que decir.


Dicen que ya pasó de moda, que la foto de Don Miguel ya no llama la atención. Próximamente lo reemplazará la imagen de una dentadura corroída por la nicotina. Sin embargo, sus logros como rostro de la ley antitabaco ya no se los quita nadie. En un par de años, Miguel García pasó del anonimato a convertirse en un icono popular tan chileno como los porotos y las micros amarillas.

Su tarjeta de presentación dice “tabaquismo”, y efectivamente, eso es lo que hace: es el superhéroe antitabaco y dedica su vida a combatir al enemigo. Pero la historia se remonta muchos años al pasado. Don Miguel (74) nació, creció y se educó en Santiago. Estudió en el colegio San Agustín. Su primer contacto con el tabaco tuvo lugar durante sus años de adolescente. Cuenta que en una reunión entre amigos, alguien sacó un cigarro y lo fueron pasando de uno en uno hasta que llegó a él. Recuerda que la marca del cigarrillo era “Pectorales”, lo que resulta irónico siendo también el nombre de los jarabes para la tos. Hoy, cuando le preguntan por qué lo hizo responde lo que cualquier persona común respondería: “de mono, de sapo y por choro”.

Trabajó varios años como chofer de camiones en las minas de San Pedro de Atacama. Al tiempo lo mandaron a buscar para que se fuera de vuelta a Santiago. Desde hace siete años que realiza charlas en los colegios y le da la batalla al cigarrillo, pero asegura que cuando no hay recursos las cosan no son fáciles. Una vez lo invitaron a su propio colegio a hablar sobre el tema, pero las máquinas de trasparencias nunca llegaron y lo hicieron esperar dos horas para una charla de diez minutos. Le dio tanta rabia que se compró su propio proyector y hoy anda con su carrito para todos lados. Un día cualquiera recibió una llamada telefónica del Ministerio de Salud; querían saber si estaba dispuesto a prestarse como rostro para la ley antitabaco. Dijo que sí. Al tiempo, sin concursos ni sorteos, lo llamaron de nuevo: había quedado seleccionado. No preguntó cuánto pagaban. Para la curiosidad de muchos, hoy confiesa que no le pagan por lo que hace.

Para Don Miguel, lo más importante es prevenir, porque corregir es más difícil y menos fructífero. Es por eso que disfruta conversando con los niños, los que a su vez lo siguen, le piden autógrafos y que se saque fotos con ellos. Sin embargo, asegura que a Chile todavía le falta conciencia, pero que parte de esa responsabilidad debe venir desde arriba y que el Gobierno debe ponerse las pilas con el financiamiento de la ley. Dice que faltaron los medios para el lanzamiento de ésta, pero que como en todos los temas de salud, nunca van a existir los medios suficientes. Para él siempre, va a ser poco.

Don Miguel se siente orgulloso de ser la única advertencia viva en las cajetillas de cigarrillos de todo el mundo. Se jacta de que “nuestra advertencia gráfica habla, tiene algo que decir”. Jamás se ha arrepentido de su decisión de participar, por el contrario significa cumplir con un deber que él mismo se impuso. Aún así, confiesa que el cigarrillo es un fantasma que aún lo pena y que intenta alejar de su vida cualquier recuerdo de sus épocas de fumador.

Si Don Miguel se proclama enemigo del tabaco, entonces al alcohol le declara la guerra. Si tuviera la oportunidad de hacerlo, participaría gustoso en campañas que combatieran la amenaza social que representa el alcohol, y que además comienza a ponerse de moda. Don Miguel conoce bien el impacto que la bebida y el exceso pueden tener en la vida de la gente; su hija mayor murió atropellada por un conductor ebrio.

Pero a pesar de tanto bache que le ha puesta la vida, Don Miguel ha sabido extraer de cada situación una enseñanza para compartir. Ese es el rol que ha adoptado para crear conciencia en Chile, un país que a su juicio tiene mucho de que sentirse orgulloso, pero que aún le falta ser un poco más justo. Ser un país más de hermanos.
BGJ.

miércoles, octubre 24, 2007

Inaugurada 27ª Feria Intenacional del Libro de Stgo.: Una Invitación a "Enfermarse Leyendo"


Este martes 23 de Octubre, a las 19:00 pm, se inauguró en el Centro Cultural Estación Mapocho la 27ª Feria Internacional del Libro de Santiago, en la que participará Brasil como invitado de honor y la Región de Coquimbo como invitado especial. 700 sellos editoriales, 1.500.000 ejemplares de libros, 100 lanzamientos oficiales y la participación de 40 autores extranjeros. Sin lugar a dudas, este año la FILSA promete.

Entre políticos, cámaras y fotógrafos, promotoras, payasos, ruido de micros y el inagotable equipo de CQC, se dio inicio a la versión Nº 27 de la FILSA; uno de los encuentros culturales más importantes del país, con trece días de duración. El sobrio escenario a la entrada de Estación Mapocho contó con la presencia de la Presidenta Michelle Bachelet, la Ministra de Cultura Paulina Urrutia, el Presidente de la Cámara Chilena del Libro Eduardo Castillo, el Embajador de Brasil Mario Vilalva, entre otros.

La ceremonia se abrió con el himno nacional, durante el cual tanto Vilalva como el Viceministro de Cultura brasilero Joao Luiz Silva se mostraron confundidos. Sin embargo, sus impresiones cambiaron cuando el señor Eduardo Castillo tomó la palabra para leer un comunicado del propio Presidente Lula Da Silva, en el cual el mandatario se expresaba muy emocionado con la invitación a participar de su país. Chilectra cumplió por quinto año consecutivo como el principal auspiciador de la Feria e hizo además un llamado a la comunidad a actuar conscientes de la situación energética del país. Pero la gran protagonista del desfile de discursos fue la Presidenta, quien subió al podio vestida de rosado y acogida por los generosos aplausos del público. La mandataria aprovechó para festejar al poeta Gonzalo Rojas (ganador del Premio Nacional de Literatura), quien por estos días cumple 90 años.

El acto concluyó con el espectáculo de la cantante brasilera Elsa Suárez, en su retorno a Chile después de más de 40 años. La artista hizo levantarse de sus sillas y bailar animadamente al público de Estación Mapocho, incluidos aquellos que presenciaban el espectáculo detrás de las rejas de contención y en los paraderos cercanos. Sin embargo, al interior del Centro Cultural el panorama resultó ser otro. Pasillos semivacíos, gente sentada y los encargados de stand más preocupados del cocktail que de sus editoriales. La situación fue criticada por un Gonzalo Rojas decepcionado que se paseó entre los libros por algunos minutos para luego retirarse, no sin antes “omitir comentarios” sobre el controversial Maletín Literario.

Se espera que durante los próximos días aumente el entusiasmo de la gente y los pasillos se llenen de chilenos “enfermos por leer”, como dijo la Presidenta Bachelet aludiendo a la lectura como “una enfermedad de la que nadie se quiere curar”.

Nadie puede decir que este año los organizadores de la FILSA no intentaron innovar. Prueba de ello es la incorporación de stands como “Los Libros Más Pequeños del Mundo” y “El Origen de Su Nombre”. Otra novedad es la participación de la editorial La Vida Es Hoy, la que presentó su colección de productos del Ché Guevara; desde calendarios y marca libros hasta la antología y las memorias del revolucionario. Crazy All Comics por su parte, estará a cargo de la mayor recopilación de historietas de la Feria. Destacan también lanzamientos de libros como “Pinochet, El Gran Comisionista”, de Mare Nostrum y “Poetas De Chile”, una recopilación hecha por la Sociedad de Escritores de Chile que reúne poemas escritos desde 1533 en adelante.

Otras atracciones que asistirán son el grupo musical brasilero “Rabo de Lagartixa”, así como el pianista Flavio Augusto y la cantante de ópera Lucía Costa y Silva, ambos también de Brasil. Entre los escritores chilenos que representarán a la Región de Coquimbo se encuentran los periodistas y escritores Gabriel Canihuante y Eleazar Garviso. Participarán también el ya mencionado Gonzalo Rojas, Alberto Fuguet, Pablo Simonetti, Malucha Pinto, entre otros. Cabe destacar además, que los días miércoles la entrada será gratuita para las lectoras.




B.G.J.



LUGAR:

Estación Mapocho


HORARIO:

- Lunes a Jueves, 14:00 hrs a 22:00 hrs.

- Viernes,12:00hrs a 22:00 hrs.

- Sábado y Domingo, 11:00 hrs a 22:00 hrs.


VALOR ENTRADA:

Entrada General (Viernes, Sábado, Domingo y festivo) $2.000

Entrada Estudiantes (Viernes, Sábado, Domingo y festivo) $1.500

Entrada General (Lunes a Jueves) mitad de precio $1.000


*Niños menores de 12 años: entrada gratuita.

*Días Miércoles: ENTRADA GRATUITA PARA LA MUJER.










sábado, octubre 20, 2007

Mi VIDA en un SOUNDTRACK.


1. Dreams - Deep Dish (Album George is On)

2. Dance 4 Life - Tiesto (Album Elements of Life)

3. Ordinary World - Above & Beyond (Aurora Remix)

4. Touch Me - Tiesto (Album In Search of Sunrise Vol. 2/CD 1)

5. Sail - Armin van Buuren (Album 10 Years)

6. Let The Game Begin - Tiesto (Album In Search of Sunrise Vol. 5/CD 1)

7. This World is Watching Me - Armin Van Buuren ( Album This World is Watching Me)

8. Bright Morningstar - Tiesto (Album Elements of Life)

9. Black Nights - ATB (Album No Silence)

10. Adagio For Strings - Tiesto (Album Parade of the Athletes)

11. Long Way Home - ATB (Album Seven Years)

12. Fantasya - Robert Miles (Album Dreamland)

13. New York City - Paul van Dyk (Album In Between)

14. Voices in Harmony - Paul Van Dyk (Album Perfect Remixes)

15. Lethal Industry - Tiesto (Album Parade of the Athletes)

sábado, octubre 06, 2007

Tiesto '07, Elements of Life: Viaje Sin Regreso.


Abrir los brazos en el aire, mirar alrededor y sentir que el mundo es más mío que nunca. Tener el control a mis pies, confiar y creer en mi misma como a diario no logro hacerlo. Rodearme de gente maravillosa que nunca creí llegar a conocer y que se han convertido en parte de mi familia. Sentirme frágil y liviana, pero al mismo tiempo intocable, lejana y única. Recordar que en el planeta no hay otra como yo, que somos únicos cada uno y que aquello que podemos entregarle a nuestro mundo nadie más podría hacerlo.

Anoche realmente sentí que podía cambiar la historia, vislumbrando aquella escena de alegría masiva y familiaridad. Miles de personas con la vista en alto, mirando hacia arriba y aspirando a más. Y celebrando como si no fueran a tener nunca otra oportunidad para hacerlo. Fue maravilloso, un paisaje visual digno de cualquier Nacional Geographic, un vistazo a nuestra humanidad más profunda. Porque en situaciones como ésta es cuando realmente nos volvemos humanos. Dejamos de lado el ruido de la ciudad y las responsabilidades, y nos dedicamos a sonreír sin vergüenza. La ropa sobra, incluso molesta. La música es lo único que existe. Buscamos sonreírle a alguien, hacer así quizás una pequeña diferencia en sus vidas, regalar algo de felicidad a quien jamás volveremos a ver. Anoche, éramos todos más humanos que nunca. Agrupados pero como individuos únicos en una gran ola de euforia y simpatía. Olvidamos las peleas y los complejos, aquello que no nos gusta de nosotros o del resto. No existió el peligro, porque de algún modo, todos estaban ahí para protegerse entre sí. No existió la rabia ni la ira, porque habría sido perder el tiempo en un viaje de infinita relajación, un camino que a diario se nos impide recorrer. No hubo tristeza y nadie lloró, quizás sí de felicidad, porque en un mundo en el que ser feliz es un lujo, en una noche como la de ayer se vuelve una obligación. Y así debería serlo siempre. No es justo desperdiciar vidas tan cortas en situaciones que jamás nos llevaran a trascender. El sufrimiento impide el desarrollo humano, o al menos lo demora, y nos atrae hacia nuestro centro más oscuro, como un agujero negro desperdiciando todo a su paso. Vivimos en un mundo que nos prohíbe reír, o incluso sonreír. En un entorno que si bien nos propone ser felices como meta de vida, jamás nos ofrece los instrumentos necesarios para lograrlo.

Anoche todos fuimos uno solo, sin importar las diferencias ni las rivalidades, sin importar aquello que siempre espera afuera de la burbuja, sin importar que al día siguiente el mundo hiciera como si nada. Porque no puede ser así, y cada uno de los que estuvimos allí anoche lo tenemos más que claro. Pero debemos empeñarnos en recordarlo siempre, impedir que una experiencia así se convierta pronto en un mero recuerdo de días pasados. Y para ello, lo más importante es mantener cerca a aquél que estuvo conmigo, que me tomó de la mano, que me abrazó, que bailó conmigo, que aprovechó para decirme algo lindo y genuino.

Lo que vi anoche superaba cualquier retrato o fotografía. La imagen de una noche saturada de belleza y emoción. Cientos y cientos de cabezas rebotando al mismo tiempo, brazos desordenados en el aire, manos extendidas intentando conservar entre sus dedos una nota musical. Las luces brillaban con más fuerza que nunca, parecían inagotables parpadeando una y otra vez sin dejar tiempo para el descanso. La música se alzaba sobre nosotros, como el soundtrack de nuestras vidas. Canciones que tantas veces antes escuchamos viajando en el metro, camino a la universidad, o antes de acostarnos. Melodías que siempre fueron tan lejanas, pero que por alguna razón envolvían nuestro diario vivir y amortiguaban las caídas y tropiezos de la rutina. Y anoche, las bailamos, las cantamos, las saltamos, y las gritamos. Anoche, las vivimos. Fuimos los protagonistas de un baile de colores y voces que jamás volverá a existir en este mundo. Tiesto a la cabeza, como un profeta que en realidad no lo es, pero que quiere hacerse pasar por uno para ayudar al resto. Y nosotros le bailamos sin pudor, como si lo conociéramos de siempre, de toda la vida y para toda la vida. De seguro así será, jamás lo olvidaremos. Ni tampoco a todos los que se detuvieron por un segundo a nuestro lado para compartir una palabra o una sonrisa.

Estos son los días más importantes de nuestras vidas (como dice el señor Paul Van Dyke, "this are the days of our lifes") y aunque a veces lo dudemos, los más fáciles. Nuestro cuerpo nos ofrece una capacidad infinita de experiencia, nos invita a probarlo todo y a sentirlo todo. Somos más libres de lo que jamás volveremos a ser. No desperdiciemos estos años en rutinas, trámites, peleas, dolores, cansancio. El tiempo es demasiado corto, y es posible que cuando se agote, no haya nada más. Vivamos nuestras vidas, jamás dejemos de movernos o de pensar. Porque sólo así se crece, y creciendo se llega a trascender. Cuando ya no quede nada de nosotros, nuestros méritos y logros nos harán presentes en el mundo.
Muchas, muchas gracias.



B.G.J.

martes, septiembre 25, 2007

"Tiempo de Avanzar, NO de Olvidar"


Jamás me ha gustado mucho la política, quizás porque no la entiendo. No es que sea tonta, es que simplemente me aburre y no he tenido nunca la suficiente paciencia como para gastar todo un día de mi vida escuchando las propuestas de cada partido político, sus deficiencias y sus integrantes. Creo que la existencia humana es demasiado corta para gastarla en sosería por el estilo. Por lo demás, la política nacional, a la que he debido poner atención durante los últimos meses debido a mi ingreso a esta escuela, ha terminado por desilusionarme casi del todo. Me atrevo a decir incluso que los seudo políticos de mi país no son más que bufones y payasos ineficientes en busca de atención. Aunque quizás no debería hablar de ineficiencia, puesto que dudo que alguien esté realmente enterado de cuál es la verdadera labor de estos personajes. En fin, resumiendo y para no distanciarme del tema central, debo decir que la política chilena se ha encargado de cavarse su propia tumba, y que no tengo mayor interés en adentrarme en su foso. Y debido a esta inexperiencia de parte mía en el tema político, durante mucho tiempo opté por creer que no tenía derecho, voz, ni criterio para juzgar o siquiera evaluar lo que ocurrió el 11 de Septiembre de 1973.

Sin embargo, hoy miro hacia atrás y creo que no fue más que pereza e incomodidad aquello me impidió participar en este monumental debate que se libra a diario a escala nacional. Y he comprendido que los hechos ocurridos en la fecha mencionada no deben ser categorizados como “asuntos políticos” bajo ninguna circunstancias. Es más, los nexos que unen al Golpe y la Dictadura Militar con la política son minúsculos, inocuos y simples justificaciones para actos inhumanos e inaceptables. De manera que como ya lo he anunciado, no hablaré de partidos ni de dirigentes en este escrito. No mencionaré al pueblo ya que creo que ni este mismo sabe con certeza quienes forman parte de sus filas. Tampoco aludiré a ningún tipo de elite social, económica o política, ni a ningún grupo de carácter similar, pues muchos de sus integrantes han aguantado demasiadas críticas inmerecidamente, mientras otros de éstos han resultado impunes de acusaciones bien merecidas. Y eso, debo decir, constituye una injusticia igual a la que se llevó a cabo con los individuos que de un día para otro desaparecieron por exponer sus opiniones y exigir sus derechos.

Creo que las naciones no deben olvidar jamás su pasado, puesto que de los errores se aprende y se logran las mejoras más importantes. Seguramente, el pueblo judío no olvidará nunca lo que sus antepasados sufrieron a manos del ejército nazi. Así mismo, las familias originarias de México no dejarán que se olvide el dolor que los norteamericanos burgueses infringieron sobre sus ancestros en busca de minas de oro y riqueza. Y de una manera similar, lo más probable es que una vez finalizada la dictadura de Fidel Castro, el pueblo cubano jamás dejará que sus sucesores olviden lo que debieron enfrentar por seguir a un líder de ese tipo o por dejarse someter. Reacciones y actitudes como éstas son naturales, aceptables y además necesarias para que ninguna de las naciones mencionadas vuelva a tropezar algún día con la misma piedra. Sin embargo, existe una diferencia entre “no olvidar” y “no avanzar”, y creo que es éste el principal problema al que se enfrenta nuestro país cuando hablamos de lo que ocurrió el año ’73. Llevamos acumulando 34 años de ira y resentimiento, 34 años de odio y de inquietud; 34 años durante los que la sociedad chilena no ha sido capaz de estructurarse como una masa sólida y única en la que todos sus integrantes puedan correlacionarse con plenitud.

Dudo que alguien se atreva a asegurar que en casos como éstos el tiempo es capaz de borrar el dolor. Yo por lo menos no estoy dispuesta a hacerlo, y tampoco creo que siquiera lo aminore. Pero aún así, es necesario aprender a llevar el pesar y el calvario de la muerte de un ser querido como un proceso; un procedimiento que debe concluir cuando ya no hay nada más que hacer al respecto. Los 34 años que han pasado no son una cifra meno, pero el tiempo se ha encargado de borrar muchas de las huellas de los asesinatos que se llevaron a cabo injusta y deliberadamente. Es necesario dejar por un segundo la emocionalidad de lado y enfrentar los hechos actuales. Muchos de los hombres que lideraron y efectuaron la matanza de las víctimas del 11 de Septiembre, han muerto ya. Otros han sido procesados, encarcelados y perseguidos. De manera que el castigo para los culpables ha dejado de ser un tema en el cual se pueda actuar o hacer algo. Por otro lado, están los cuerpos de aquellos hombres y mujeres que fueron detenidos por querer un mundo distinto; cuerpos que fueron lanzados a fosas sin nombre, al mar, al río. La realidad es que la gran mayoría de los restos de estos individuos jamás fueron registrados, ni sus tumbas fueron inscritas en algún documento oficial. Y aquellas que sí lo fueron se han perdido con el paso de los años o con los varios papeles que de seguro las autoridades militares se han encargado de destruir. Por lo tanto, el hallazgo de los cuerpos se vuelve un descubrimiento cada vez más lejano y engorroso.

Esta batalla que aún se libra en nuestro país y que aún es capaz de motivar a numerosas familias a alzar la voz en huelga, ha sido la culpable de un importante quiebre dentro de la sociedad chilena. Vivimos en una comunidad de violencia constante e intolerancia justificada por hechos y actos del pasado. Debemos contemplar y aceptar a la vez la absurda rivalidad y odio existente entre los grupos políticos de izquierda y de derecha, una antipatía sin fundamento real en el mundo de hoy. Una enemistad que perjudica la evolución de Chile como nación y que impide que vivamos como aliados para concentrarnos juntos en un problema de mayor importancia o urgencia.

Así como han muerto los propios autores de los horrendos asesinatos de la Dictadura, también han comenzado a morir y a envejecer los familiares más directos de las víctimas. O al menos aquellos que presenciaron con sus ojos el caos que se vivió en nuestra nación y cuya visión de los hechos es real y objetiva. Así, las nuevas generaciones y “los hijos de los hijos” se han visto obligados a cargar sobre sus hombros el peso de una lucha vacía, irracional e infructífera. Han debido aceptar una herencia de odio y rencor, así como el peso de batallar una guerra que no es la de ellos. Han debido adoptar prejuicios impuestos, y que algunos incluso no comprenden del todo, pero que a final de cuentas lo único que hacen es perjudicar a estos jóvenes e impedirles un desarrollo pleno dentro de la sociedad. Y creo que esto es realmente es inaceptable: la cúspide del egoísmo y de la soberbia. Podría causar el estancamiento no sólo de un país, sino también de individuos inocentes que deben actuar por un supuesto “deber familiar”.

Es cierto, el dolor no desaparece jamás del todo. Pero no porque dejemos de transmitir el odio y el desconcierto propio de éste, los hechos serán borrados de la memoria nacional. Por el contrario, debemos ser capaces de enfrentar con dignidad, honor y sobre todo orgullo, las muertes de aquellos valientes que no bajaron la cabeza frente a nadie, y que aquello los llevó directo a la muerte. Los culpables serán condenados, al menos en sus conciencias. Pero ya basta de tanta lucha insensata y violencia necia. Los mártires ya han sido reconocidos como tales y ahora debemos darle más importancia a la labor que realizaron y al ejemplo que nos dejaron. El odio y el recelo no conducirán nunca a nada; no levantarán de sus tumbas a los muertos ni se convertirán en pruebas de culpabilidad reales contra los victimarios.

Es hora de mirar hacia delante, con el pasado bajo el brazo y la iniciativa de construir un país en el que aquel escenario del 11 de Septiembre no se vuelva a repetir. Dejemos de poner a Chile contra Chile, y a las familias chilenas contra las familias chilenas. No es olvidar, es llevar los recuerdos con orgullo pero saber levantarse de la caída.


B.G.J.

viernes, agosto 31, 2007

"¡¡Hagamos un cacerolazo!!"; El llamado a las armas de la Abuela Transantiago



“Salgamos a protestar”.- Así comienza el discurso de la Abuela Transantiago, la mujer que se ha vuelto famosa durante los últimos días gracias al video de dos minutos captado en pleno horario pick de movilización. El publicista de 25 años, Felipe Plaza, habría grabado a la mujer con su celular al interior de un vagón de metro de la Línea 4. Video de la semana según LUN e integrado al repertorio de los más vistos en YouTube.com y ElAntro.cl.

La Abuela Transantiago no tiene nada que envidiarle a ningún candidato político ni a los dirigentes huelguistas de la CUT. Con sus varios años encima y un discurso potente, esta anciana sin pudor dictó sentencia para los “pelagatos de ministros” que no han solucionado las fallas de este sistema de locomoción que ya lleva casi siete meses funcionando. O al menos, tratando de funcionar. En su declaración la mujer asegura que “los hombres son unos cobardes”, y que en lugar de levantarle la mano a sus señoras, deberíamos unirnos todos y “levantarle las manos al gobierno”. La anciana, probable contra partidaria del régimen de la dictadura, afirma en el video que jamás le tuvo miedo a los militares y que no existen razones para temerle tampoco al Gobierno actual.

A pesar del éxito y la gran suma de seguidores que el video ha generado, esta mujer de valiente discurso y carácter revolucionario aún no tiene nombre. Ningún medio ha sido capaz de dar con su paradero, aunque se presume que cuando fue grabada viajaba entre las estaciones Macúl y Cristóbal Colón.

Las reacciones difieren entre los que aquella tarde viajaban junto a la Abuela Transantiago y los usuarios que han visto el video vía Internet. Los pasajeros del metro, apretados unos contra otros y cansados del monólogo de la mujer, optaron por sepultar el discurso con comentarios irónicos y burlas. Finalmente, se resolvió ceder un asiento para que la predicadora dejara de armar escándalo. Sin embargo, la reacción que se ha visto en los foros resulta completamente opuesta; apoyo y hurras por la anciana que se ha atrevido a desafiar al Gobierno y a dar la cara en el intento.

¡Cuidado Zamorano! Parece ser que si de apoyo al pueblo se trata, el Transantiago tiene un nuevo rostro.

B.G.J.

VIDEO AQUÍ

http://www.youtube.com/watch?v=m4P5OIsplIk




lunes, agosto 27, 2007

Yo No Tengo Héroe


Corta, de una. No tengo y creo que jamás he tenido alguna figura heroica a seguir en mi vida. Modelos tampoco porque crecí demasiado consentida y orgullosa como para mirar hacia arriba a cualquiera. Y que conste que me planteé y replanteé una y otra vez la cuestión de mi héroe o heroína, y aún así no fui capaz de hallar alguno de mi preferencia. Gente admirable sí, por supuesto que sí; aquellos que han hecho de sus vidas lo que siempre soñaron, que no sólo han llegado lejos sino que han alcanzado el punto que ellos mismos se impusieron. Admiro a los dueños del éxito: no a los que han conseguido pequeñas victorias, sino a los que han comprendido el éxito en todos los ámbitos de la vida humana.

Creo que mi generación en sí carece de modelos o se limita a unos cuántos. Quizás porque hemos visto demasiadas derrotas y fracasos y son muy pocos los líderes exentos de dichas frustraciones. Desde Bob Marley, muerto en Miami y lejos de su amada tierra jamaiquina, hasta Muhhamad Ali quien siendo durante su vida un coloso boxeador, sucumbe ante la enfermedad del Parkinson. Desde Mahatma Ghandi, asesinado mientras se dirigía al templo para rezar, hasta El Rey, Elvis Presley, hallado muerto misteriosamente en la bañera de su mansión. Y así con todos, el asunto jamás termina. Por muy grandes, fuertes, alabados y glorificados, cada uno de los modelos que la historia se ha dignado a presentar como héroes, han sucumbido ante las enfermedades y sus propios rivales. Porque ni una sola alma puede escapar a las manillas del reloj; a la muerte. Y si bien que el hombre muera no sea una razón suficiente para invalidar sus logros, da fe de que ningún héroe es invencible del todo. Por otro lado, los héroes no son más que meras ejemplificaciones de perfección o de ideales planteados por la sociedad. De manera que limitan al individuo a trabajar determinadas cualidades con mayor esmero que otras que no son apreciadas por su entorno.

Mi generación, al menos los jóvenes como yo, ha optado por liberarse de sus ataduras tradicionales y dejar de lado los cánones y modelos impuestos por las generaciones predecesoras. Ya a nadie le importa cómo se supone que debemos ser o actuar, ni cómo debemos desenvolvernos y hasta dónde debemos llegar. Hemos alcanzado un punto en el que batallamos por nosotros mismos mediante nuestros propios medios puesto que en la actualidad vale más diferenciarse que apegarse a un modelo. La población ha aumentado con semejante magnitud y rapidez que la vida diaria y el crecimiento humano se han convertido en una carrera por ser mejor que el otro, lo que a fin de cuentas es ser distinto al otro. Hoy somos nosotros nuestros propios héroes, buscamos romper los récords que otros establecieron, ir más allá de las metas comunes, convertirnos en ejemplos a seguir. Ya nadie quiere ocultarse bajo la sombra de otro que algún día llegó más lejos. Quizás he aquí la razón de por qué cada vez más jóvenes dejan de identificarse con los partidos políticos, y de por qué cada día que pasa aumentan las tribus urbanas y los distintos estilos. Jamás se había visto en la medida en que se ve hoy tanta posibilidad de ser; tantas formas de vestir, músicas que escuchar, maneras de hablar, lugares adonde ir.

Frente a este panorama, la idea de los héroes patrióticos como ejemplos de vida resulta absurda. En especial puesto a que vivieron en un Chile prácticamente ajeno al de hoy, en un mundo que siquiera era capaz de proyectarse hacia aquél en el vivimos nosotros. De manera que buscar imponer a los niños en los colegios, a los adolescentes en los textos universitarios y al país entero mientras se acercan las fiestas patrias, estos hombres como ideales de vida, no es más que evitar inútilmente el pasar de los años. Los héroes de ayer no pueden ser los de hoy, es imposible concebir sus existencias en una sociedad como la actual. Lautaro por ejemplo; con su escasa altura, su contextura gruesa, sus ojos negros, rostro lleno, su espalda robusta, su sangre indígena pura, habría sido blanco perfecto de la discriminación chilena contra sus propias raíces. Diego Portales; otro caso incompatible con nuestro Chile de hoy. Dudo que cualquiera hubiera aguantado las propuestas centralizadoras y anti demócratas que este antiguo mandatario se atrevió a imponer durante su gobierno. Es más, Portales se negó siempre a creer que la democracia podía resultar conveniente para las naciones sudamericanas, arcaicas y subdesarrolladas como él las veía. Finalmente, qué habría sido del “padre de la patria”, don Bernardo O’Higgins, en un Chile en el que para empezar nadie quiere ser padre de nada. O del propio José Miguel Carrera, proclamando su patriotismo y sus ideas nacionalistas frente a un montón de chilenos que sólo dicen serlo cuando el tema en cuestión son los feriados de las fiestas patrias.

No es desmerecer a los fundadores de la nación ni desvalorizar sus esfuerzos por construir un mundo mejor. Por el contrario, les estamos agradecidos. Pero la realidad es que hoy todo aquello ya no importa, o al menos resulta secundario frente a otros proyectos como el éxito profesional, una próspera vida social, una relación amorosa estable, etc. Al igual que ayer, la ley de la selva es aún un dogma obligado. La diferencia se halla en que hoy no gana el más fuerte, sino el más inteligente. Hemos alcanzado un prospecto humano más enfocado en superarse y competir contra sí mismo, un proyecto de humanidad basado en el desarrollo y no en la imitación. Vivimos en una constante renovación de héroes en la que nosotros somos la mejor propuesta. Mirar hacia arriba es limitar nuestra existencia, mirar hacia adentro es potenciarla.
B.G.J.

jueves, agosto 16, 2007

Barrio Estación Mapocho: Sexo, Verduras y Alcohol


El barrio Estación Mapocho es como un borracho a la antigua; grita con descaro y jamás pasa desapercibido. Entona una canción alegre que conoce de memoria, quizás porque le recuerda a épocas pasadas y mejores. Conoce a todos pero saluda sólo a los amigos, a los confiables. Frente a los desconocidos opta por callar y desviar la mirada. Ha visto muchas cosas y morir a muchos amigos. Poco a poco, se va quedando solo. Pero jamás pierde su alegría.

Guerra de Bares.
El Touring Bar lleva 89 años instalado en Gral. Mackena 1076, entre picadas que intentan hacerle la competencia con sus completos y chacareros. Tras el mesón color ciruela, una muralla de botellas de vino y otras de colores se extiende con encanto. Una caja registradora de proporciones gigantescas yace sobre el mesón, y detrás de ella apenas se divisa a la Sra. Vicky sacando cuentas. Esta mujer es dueña del local desde hace 7 años, y nuera del dueño original. En el Touring Bar no se admiten revoltosos ni borrachos, aunque lo que más se venda sea la chicha y el navegado. El lugar es administrado por mujeres, pero los clientes más fieles pertenecen al sexo masculino.
A menos de una cuadra, en la calle Aillavilú, un edificio amarillo parece no encajar entre los locales de mala muerte. Es La Piojera, el bar de 91 años que la cultura guachaca ha decidido condecorar como Monumento de Los Sentimientos de la Nación. Su fama es indiscutible, cinco presidentes han pasado por él: Alessandri, Ríos, Allende y Frei padre e hijo. La Piojera se enorgullece de su clientela y cualquiera con buenos ánimos tiene las puertas abiertas. En su interior se canta, se ríe, se grita, y sobre todo se bebe. Si de tragos se trata, el “terremoto” y el “tsunami” son propuestas obligadas. Pero La Piojera no sólo es del pueblo, también conciente a su elite reservando para ésta el salón H.I.P. (“huevones importantes”). Es uno de los pocos bares en los que se mezclan las identidades y nadie lo nota; escritores, poetas, trabajadores, estudiantes. Lo que importa es la tolerancia.
Sin embargo, muchos bares como éstos han pasado ya a la historia o han optado por renovar su clientela. Es el caso del Wonderer, antiguo rival de La Piojera y el Touring, que tras cambiar de establecimiento, dejó de lado la tradición y es hoy un pub para universitarios.

El Monstuo.
Así es como los bares de Estación Mapocho se han ido perdiendo en la memoria. Y es que de seguro no debe ser fácil competir con el máximo devorador de turistas: el Mercado Central, que ofrece al público su interminable variedad de productos marinos y platos chilenos. Parece ser que en su interior todos se sienten protegidos y resguardados. Incluso los “lanzas” de la zona, que a menudo se internan entre sus laberintos con la esperanza de ponerse a salvo con su botín y dejar atrás a los carabineros de turno.

Café Con Coquetería.
Tentación Grado 3, Peter Pan, Pasion, Xenon, Tú y Yo; son algunos de los cafés con piernas y sitios topless que se ubican entre Gral. Mackena y Santo Domingo. Ventanales polarizados, cumbias que se cuelan entre las cortinas de colores que hacen de puertas para estos locales, trabajadores de terno que ingresan con el maletín en la mano y casi siempre solos. Verdaderos refugios para el hombre chileno que ofrecen junto a un café algo más que una galletita.

Bandera de Colores.
Jeans y chaquetas, camisones de dormir, zapatillas, ropa interior, sombreros y bolsos, incluso trajes de novia. Ésta es sólo una parte de los productos que ofrecen los numerosos locales de “ropa americana”. Al interior de estos sitios no se admite ser quisquilloso, las mejores ofertas compensan la dudosa procedencia de las prendas en venta. El panorama es singular; cientos de perchas apretadas y ropa de colores que construyen ante la mirada de los transeúntes verdaderos arcoiris de telares.

Ancianos con el diario bajo el brazo, abuelas compinches, madres y sus hijos de la mano, ejecutivos y colegialas. El barrio Estación Mapocho jamás descansa. Incluso cuenta con sus propios personajes, como Osama Bin Laden, un hombre de edad, barba gris y tez oscura que deambula por el sector dejándose caer de bar en bar. Los vendedores de frutas y verduras siempre tienen un piropo a flor de labios. Parece ser que ni la delincuencia, ni el narcotráfico, ni la prostitución, ni el Transantiago han logrado atenuar la alegría de uno de los sectores más propios de la tradición del centro santiaguino.
B.G.J.

viernes, julio 13, 2007

Quiero...

Quiero un día para mirar por la ventana.

BGJ.


viernes, julio 06, 2007

"DJ WASK: El Chileno Disfrazado de Titán"


Andrés Salinas (34) es Dj Wask; uno de los djs electrónicos chilenos más reconocidos, con 10 años de experiencia profesional. Productor de M-Powered Artist de M- Audio Latinoamérica y endorser de Pioneer Dj. Conductor de programas radiales en Carolina y Radiozero. Fundador de la escuela de djs chilenos, Dj School. Creador del grupo Freakygroove y propietario del sello DNW Records. Sin duda, un personaje con mucho quehacer. Un verdadero trabajólico encubierto.

Primeros Pasos.
Andrés Salinas frecuentaba las fiestas de colegios como cualquiera de sus compañeros; mas su objetivo se alejaba del común. Asistía con el fin de observar la reacción del público frente al dj de turno. Pronto comenzó a tocar en sus propios eventos y fiestas pequeñas. Al finalizar la etapa escolar, se instaló con una discoteque en Santiago y otra en Temuco. Su intención fue siempre construir su propio ambiente, configurar sus propias opciones. Nunca le gustó que le dijeran qué hacer y cómo hacerlo.

Entre Showman y Empresario.
No hay duda de que Dj Wask existe para su público. Cuando toca, lo hace con los brazos en el aire, sonriendo a la multitud, animando a sus espectadores a participar en el show. En especial, se regocija con sus gritos. No le importa pecar de soberbio cuando dice que sabe bien lo que la gente quiere. No consume drogas; le basta con el feedback de un público que sólo le responde a él. Como productor, Salinas también trabaja para satisfacer a la gente. Asegura que aquello que más necesita nuestro país es ampliarse a la innovación. Y para responder a esta necesidad, se ha encargado de producir eventos como las “Silent Parties”; las primeras fiestas en Chile “con audífonos” en lugar de los ensordecedores parlantes.

Un Fetiche Tecnológico.
A Wask le apasiona la tecnológica y los nuevos avances. Quizás porque ha vivido el proceso desde sus inicios; creando música con cassetes, vinilos y una sola tornamesa, todo un sistema arcaico. Constantemente renueva sus equipos, incorpora novedades a sus sets, intenta innovar y adelantarse incluso a sí mismo. Asegura que el desarrollo del dj depende de que éste actualice con regularidad sus métodos de trabajo. “Uno puede mezclar muy bien, pero es necesario agregar otras cosas”, dice. Los nuevos equipos son un juguete para el niño que lleva dentro.

La Vuelta al Mundo: Stop en Ibiza.
Es todo un trotamundos. Y a pesar de ello, se atreve a decir que no siente favoritismo por ningún público en especial. Asegura que con él, todos lo pasan bien. En el Shamrock, Buenos Aires, su presentación de una hora duró casi cuatro horas y media. Ha tocado en Miami, Brasil, Argentina, Paraguay, Colombia, Ecuador, Perú, España, Alemania e Ibiza, la isla que lo conquistó con su extrema belleza y sus fiestas desenfrenadas. Existe una leyenda que dice que Ibiza “o te acoge, o te manda de regreso”. Wask cree que la isla lo aceptó, pues siempre vuelve por más. Es el paraíso de los djs: te los encuentras a todos, sobre el escenario o en la pista de baile.

Mamitis Aguditis vs. Un Papá Amigo.
Andrés Salinas tenía 16 años cuando su padre falleció. Nunca fueron muy cercanos, discutían en exceso. Por lo mismo, fue más hijo de su mamá que de su papá, aunque ninguno jamás le negó algo. Con ella mantuvo siempre una buena relación. Hoy, su madre tiene 65 años y forma parte de los fanáticos más fieles de su hijo. Lo llama a la radio para felicitarlo por los temas que toca y para exigir también los que a ella le gustan. Viven juntos desde el 2005, luego de que el matrimonio de Salinas finalizara tras 8 años de convivencia. No habla mucho del tema, esquiva las preguntas al respecto. Pero de Dabhya, su hija de once años, sí habla y bastante. Confiesa que mantienen una relación casi de amigos. Salen a andar en bicicleta o hacen snowboard juntos. Se mandan emails y chatean por Msn.

Un Schedule de 24 Horas.
Wask jamás descansa, aunque sí lo intenta. A menudo desearía que los días fueran más largos. Sin embargo, los años de experiencia le han enseñado a su metabolismo a adaptarse, o por lo menos a quedarse dormido en el backstage. Sus cercanos no comprenden de dónde es que saca tiempo para el sinfín de cosas que hace a diario. Pero es Dj School el proyecto que hoy recibe la mayor parte de su atención; una idea que surgió hace 9 años, y que junto a su hermano Patricio (25) ha logrado sacar adelante. Las clases que en un principio se montaban esporádicamente los días sábados en la discoteque Ex Fábrica, hoy se han convertido en cátedras diarias al interior de un edificio propio.

Andrés Salinas no es un “superhombre”. Tampoco ha alcanzado el éxito gracias a intervenciones divinas, aunque quizás sí ha tenido un poco de suerte. Es más bien un hombre común de gran carisma que sabe hacer buen uso de sus múltiples habilidades sociales. La gente lo busca y disfruta con él. El público lo sigue no por su reputación de ser unos de los djs chilenos más destacados, sino más bien porque él les dedica su tiempo, sus ganas y su trabajo. Para Wask la tornamesa no es un escondite; es su podio, su mejor manera de proclamar su discurso.


B.G.J.

viernes, junio 22, 2007

"Tranpacífico; La Bella y La Bestia"



“Transpacífico”
Centro Cultural La Moneda
18 de Mayo al 22 de Julio


Antes de iniciar el siguiente comentario, quisiera advertir a los amantes de los buenos modales y a los guardianes de la compostura. La exposición Transpacífico puede resultar un tanto impactante para los “Carreños” de hoy. Estoy segura de que más de algún espectador incauto ha sido sorprendido por esta colección que muchos han distinguido como “asquerosa”, o “fea”. Seamos cuidadosos con nuestros juicios, ¡qué peor ofensa para una obra de arte que ser tildada de “fea”! Sin embargo, Transpacífico parece más bien desprenderse de los cánones estéticos clásicos, y jugar un papel de incentivo a razonar; a reevaluar nuestro concepto de belleza y fealdad. Si el mundo cambia y se transforma, ¿no debería también hacerlo la estética?
La colección de obras, creaciones de artistas chilenos y de otros del Pacífico Asiático, podría encontrar su personificación en uno de los clásicos de la literatura infantil; La Bella y La Bestia. Combinando elementos atractivos para la percepción estética y otros que se alejan casi del todo de este ojo crítico, los artífices han logrado confeccionar un telar de opiniones que reprochan el modelo de vida actual. Una especie de crítica a todos, con todos y para todos. Para comprender la propuesta esencial de la exposición, basta con atender a “United Nations – Man & Space” (Naciones Unidad – Hombre & Espacio); la obra que cuelga sobre el hall principal del Centro Cultural. Un tejido de 188 banderas, confeccionadas todas con cabello humano, que tiene como creador al artista chino Gu Wenda. La intención de la obra es presentar simultáneamente la condición utópica de nuestra especie a través de los cabellos, y la figura de las banderas como un símbolo de división geopolítica.


La Bella.
Destacan las obras de dos artistas. Simryn Gill, nacida en Singapur y actual residente de Sydney, y Yang Zhenzhong, nacido en Zheijiang, 1968; hoy vive y trabaja en Shanghai. Aquí el protagonismo se lo roba el humor, la dedicación y una belleza más cultural que visual. La oferta es gentil, cálida y ligera.
Symrin trabaja de un modo singular; colecciona, archiva y clasifica. Un grupo de fotografías componen una de sus propuestas más especiales. Son retratos de individuos de razas distintas que representan sectores culturales fuertemente golpeados por la discriminación. De sus cuellos cuelgan collares fabricados con “perlas de papel” que un día fueron hojas de libros. Estos textos narran el desarrollo cultural de distintos grupos étnicos y naciones. Para comprender el significado de cada obra, es necesario fijarse con detalle en los respectivos títulos.
La colección de Zhenzhong es incluso menos tradicional. El artista explota la fotografía, el video y las imágenes simuladas, lo que despierta el interés de los jóvenes y de los devotos de la tecnología. Desecha la antigua concepción de obra y de museo; sentarse frente a un pedazo de género a contemplar una imagen inmóvil e inerte. En sus retratos, los ciudadanos “sostienen al mundo con un dedo”. Consiste en una crítica al desequilibrio social que atraviesa China en la actualidad, un intento esperanzador por alterar el aburrimiento y la sobriedad del diario vivir.

La Bestia.
En este punto, los juicios y opiniones idealistas se hacen a un lado para dar lugar a una crítica más cruda, severa y descarnada. Las propuestas más controversiales son las secuencias de Kuang-Yu Tsui, artista nacido en Taipei, Taiwán; y las video-perfomances de Kan Xuan, nativa de XuanCheng que hoy vive en Beijing.
Los videos de Kuang-Yu pueden resultar cómicos en un principio. Pero tarde o temprano, las imágenes de un joven al cual le lanzan objetos en la nuca para que los reconozcan, resultan impactantes. Así también la secuencia de otro individuo que corre y se lanza contra murallas, carteles, edificios, estatuas, etc., en un intento por “penetrar en la cultura”. La agresión y violencia sicológica que esconden ambos videos denotan una crítica irónica a los patrones de conducta popularizados globalmente. Un reproche a las dificultades que el hombre moderno debe enfrentar para integrarse a su entorno.
Los videos de Kan Xuan son simples. Reproducen procesos biológicos del hombre tan comunes como la alimentación y la digestión. Sin embargo, a pesar de su cotidianidad, la exposición de dichos procesos como una obra de arte confunde al espectador. La creadora y protagonista de las imágenes, mastica y escupe una especie de masa integral; la cual luego es cocida y dispuesta para repetir el procedimiento una y otra vez. La exposición es cruda y apta sólo para aquellos con estómagos fuertes. La propuesta busca cuestionar por qué procesos humanos tan naturales se han convertido en actos repugnantes limitados a la intimidad. Critica las costumbres actuales y la visión tan poco humana que tiene el hombre actual de su propio cuerpo.

La colección es extraña, y por lo mismo, interesante. Se encuentra repleta de curiosidades y rarezas que no suelen verse a menudo en un contexto público. Y si bien, constituye un panorama aparentemente recreativo, es esencial que no nos limitemos a este tipo de disposición. Transpacífico no es un circo ni una feria de fenómenos. Plantea una temática humana que ha sido desplazada del mundo actual por la modernidad y la globalización. Busca recrear la esencia misma del hombre y de su comunión entre cuerpo y mente. Es un retroceso a la condición nata de la humanidad, de una especie que ha olvidado su origen, y que pretende encaminarse a un futuro sin tener en cuenta su pasado.


B.G.J.

miércoles, junio 13, 2007

Cuestión


¿ Por qué barremos las hojas secas?

miércoles, junio 06, 2007

"For An Angel": La Consentida del DJ Alemán, Paul Van Dyk


Las imágenes se sobreponen unas a las otras con rapidez. Los cuadros color sepia abundan en brillo y luminosidad. Un hombre pálido e inmóvil yace largo sobre la arena, con la espalda recostada en el tronco de una palmera. Lleva anteojos oscuros, tan oscuros que simulan espejos, una camisa azul sedosa y pantalones. Las imágenes evocan un paraíso tropical olvidado; ruinas irreconocibles, indígenas cuyo origen resulta imposible deducir. El hombre de camisa se sienta sobre una silla de playa mientras contempla a dos niños que juegan a la pelota frente a un rudimentario arco de fútbol. La naturaleza a su alrededor parece dedicarle su existencia, unas cuantas mariposas se sitúan sobre aquel hombre sin gestos, como si se posaran sobre una roca. Es un dios: el dios del Trance. (Video Clip “For An Angel”, Paul Van Dyk”)


Nacido en el año 1971 en Eisenhuettenstadt, este de Alemania, Paul Van Dyk vivió su infancia y adolescencia en medio del revuelto propio de un Berlín comunista. Crecido en los suburbios de una población alemana, comenzó a incursionar en la remezcla de canciones con dos viejas tornamesas usadas. Para entonces, la club culture no penetraba aún en el este alemán. Sin embargo, se podían oír los nuevos temas en la señal de radio alemana del oeste. Así, inspirado en grupos como The Smiths y New Order, Paul Van Dyk comienza a componer y a grabar cintas para sus amigos más cercanos.

Cae el muro de Berlín y esta emergente cultura musical empieza a expandirse a lo largo de todo el territorio alemán, adueñándose de numerosos clubes y discoteques. El techno invade las pistas de baile y Paul no demora en aprovechar esta oportunidad para adentrarse en este mundo. En marzo de 1991, el novato se presenta públicamente por vez primera en un club de Berlín llamado “Tresor”. El éxito fue absoluto.

En 1994, comienza a escribir y grabar su primer disco, titulado “45 RPM”. Cuatro años más tarde la producción es lanzada oficialmente en el Reino Unido. Los resultados superan las expectativas de todos. El álbum se mantiene durante dos semanas como nº1 en Inglaterra, y durante cuatro en Alemania. El single “For An Angel” se apodera de los clubs y se consagra como un clásico dentro de la música electrónica trance.

Se dice que fue gracias a ésta que Paul Van Dyk logró alzarse por sobre la gran mayoría de los djs electrónicos internacionales. La canción se convirtió sin duda, en la representación propia del emergente género del trance melódico. Marcada por un beat rápido y dinámico, For An Angel es ante todo un llamado de atención al público. Una invitación dirigida al espectador a detenerse por un segundo y a aislarse de la rutina diaria del trabajo y la ciudad. Sube, baja, vuelve a subir: el movimiento y los cambios son constantes. La melodía es ágil pero invita a la calma.

For An Angel fue establecida como la mejor canción electrónica del milenio pasado. Es la prueba viva de que una sola tonada puede dar más fe de los grandes talentos de un artista que un millón de recopilaciones y remixes. Ésta se ha convertido en la esencia misma del estilo de Paul Van Dyk. Gracias a ella, el Dj fue invitado a formar parte como residente del Gatecrasher Club; uno de los más prestigiosos, en él se han dado conocer varios de los músicos electrónicos más reconocidos. En asociación con Gatecrasher, el artista alemán lanzó su campaña “No Pills, Just PvD” en la que se declaró en contra de las drogas y las sustancias. Éstas serían culpables de perjudicar la reputación de la música electrónica.

“Best Music Maker” según la revista “DJ”. “Leader of the Trance Nation” conforme la opinión de la “Muzik Magazine”. Reconocido como “Men Of The Year” por la “Myxmag”. Paul Van Dyk es hoy varias cosas, y recibe también varios nombres. Con 19 premios internacionales, 10 álbumes y 21 singles, podemos estar seguros de algo que este artista no es: pasajero. Mientras la música electrónica siga abriéndose lugar dentro de la cultural musical de todo el mundo, este alemán de 36 años permanecerá a la cabeza, innovando, creando y sacudiendo la pista de baile de los hambrientos por el trance.



B.G.J.

domingo, junio 03, 2007

Relaciones Intrahumanas: Condicionantes del Hombre


¿En qué punto se convierte un desconocido en aquello que llamamos amigo? ¿O incluso, en algo más? ¿Por qué nuestra condición humana nos obliga a dejar entrar a entes completamente ajenos? ¿Por qué decidimos fusionarnos con otro al minuto de amar? ¿Por qué optamos por volvernos vulnerables?

Si nos basamos en el sentido común, el hecho de entregarnos a una relación, de comprometernos con alguien que antes no estaba ahí suena del todo ilógico. Es lanzarse a los tiburones por un par de monedas. Es pagar una fortuna por un ramo de flores. Pero como los seres irracionales que somos, aún estando conscientes del peligro que representa esto, nos entregamos igual. Todo indica que el valor de aquel par de monedas y de ese ramo de flores es superior al que por lo general le asignaríamos. Si seres extraterrestres situaran cámaras en nuestro planeta para observar nuestro comportamiento, nuestro forma de manejar las relaciones intrahumanas, lo más seguro es que no entenderían absolutamente nada. De hecho, desde el punto de vista que he adoptado para escribir este análisis, el comportamiento del hombre con sus semejantes me resulta absurdo.

Nos quejamos y lloramos cuando nos hieren. Y en respuesta de esta herida, nacen los anhelos de venganza, el sentimiento de odio y de ira. Esperamos durante toda nuestra existencia a la media naranja, esa alma gemela que de algún modo sabemos que existe. O por lo menos, eso queremos creer. Nos convencemos de ser capaces de hallar en otros seres humanos cualidades que los hagan dignos de relacionarse con nosotros. Evaluamos a cada quien según su afinidad con nuestra persona. La acción es innata, lo más probable es que ni siquiera nos demos cuenta al minuto de llevarla a cabo. Pero la verdad es que esta forma de actuar no es más que una extensión de nuestro orgullo y nuestra soberbia humana. ¿Con qué derecho nos sentimos dignos de juzgar a quienes nos rodean? ¿Por qué deben ser nuestro parámetros los más apropiados para hacerlo? Es absurdo que siendo todos hombres iguales, nos consideremos capaces de evaluar correctamente a un semejante, y por lo demás confiar en que nuestro juicio jamás resultará equívoco. En especial porque entre él y yo no existen diferencias reales; ambos nos enfermamos, tropezamos, fallamos, nos ensuciamos. Es de suponer que cuando alguien evalúa a otro o lo juzga, éste debe saber ejercer correctamente dicho trabajo. Como mínimo, debe conocer mecanismos que vayan más allá de lo humano, parámetros superiores al hombre. Pero la verdad es que ninguno de nosotros los conoce. Nos desenvolvemos en una realidad demasiado física y limitada para poder reconocer aquello que de verdad hace valioso a alguien. Cualquiera se defendería de esta afirmación justificando que se ha acercado a sus amigos debido a que son personas amables, generosas, incondicionales, constantes. Pero la realidad es que somos nosotros quienes les asignamos dichas características. Mi amigo es leal porque yo necesito que lo sea, y en las instancias en que deje de serlo lo más seguro es que desviaré la mirada hacia otro lado, o dejará de ser mi amigo. Consideramos a la gente según nuestras propias necesidades.

El hecho de que sólo seamos capaces de relacionarnos con los demás según modelos tan básicos, da fe de las enormes limitaciones sicológicas y emocionales del hombre. A todo aquél que conocemos a lo largo de nuestra vida, lo encasillamos en la categoría de familia, amigo o pareja. Sin darnos cuenta, al dividir a nuestros semejantes en sectores tan básicos y generalizados, condicionamos nuestra propia existencia. Esto debido a que con cada uno de ellos debemos actuar de una determinada forma. Así, nuestro comportamiento diario se limita a un patrón concreto que depende de a quién estemos tratando. Es más, la sociedad en conjunto se encarga a menudo de reprender a quienes rompen estas normas de conducta. Según la ética tradicional, es incorrecto tener relaciones sexuales con un amigo si no existen intenciones amorosas de por medio. Tampoco se nos permite besar a un hermano de sangre; este acto sería tildado de aberración, y tener un hijo con él sería un incesto. Pero ¿qué es realmente una aberración o un incesto? ¿Quién se atrevió a categorizar a ambos como una inmoralidad, una injuria contra los valores? ¿Con qué capacidad lo hizo siendo sólo un humano más?

Nuestra forma de actuar se define según la crianza que nos propicie nuestro entorno y los patrones de comportamiento que nos asignen nuestros superiores. Somos hijos y debemos respetar a nuestros padres. Somos hermanos y debemos compartir entre nosotros y convivir de igual a igual. Somos niñas y debemos jugar con muñecas y tasitas de té. Somos mujeres y debemos saber al menos preparar un plato de arroz o tallarines. Incluso cuando elegimos una carrera, dicha carrera se encuentra condicionada por un modelo de individuo que se le impone o se le asigna. Los periodistas son extrovertidos, mordaces y corruptos, capaces de hacer lo que sea por conseguir la información necesaria para publicar. Los abogados son fríos y calculadores, los arquitectos son soñadores y creativos. Los modelos de pasarela son superficiales e ignorantes. A veces llegamos a convencernos de que debemos actuar así para tener éxito en nuestra profesión. Es más, a menudo las profesiones se reconocen y diferencian según dichas características. Al final, optar por una carrera no es elegir en qué trabajar, sino más bien qué tipo de individuo ser.

La pareja es sin duda la categoría humana que nos resulta más difícil cuestionar. Y cuando nos atrevemos a hacerlo, lo hacemos con recelo e inseguridad. Esto debido a que se ha convertido prácticamente en una meta de vida. Todos buscamos, queremos y luchamos por aquel semejante que consideramos digno de acompañarnos a lo largo de nuestra mísera y corta existencia. Aquél que evaluamos según qué tanto nos gusta, y qué tanto nos complace. Debe prestarnos utilidad, servirnos de compañero, congeniar con nuestra forma de ser. Y antes de que lo amemos, debemos estar seguros de que nos amaría de vuelta. Las relaciones amorosas no son más que respuestas a nuestro ego. De hecho, cuando pensamos en la otra persona, pensamos en su relación con nosotros, no en él como individuo independiente. El amor nos condiciona, nos limita, y nos convierte en seres dependientes. No es un misterio universal que cuando amamos es cuando más expuestos nos encontramos. Aún así, amar nos entrega la mayor satisfacción de todas, aunque rara vez nos detenemos a comprender cuál es. No es el amar a alguien lo que nos hace felices. De hecho, cuando amamos y no nos aman nos convertimos en seres miserables. La satisfacción del amor se encuentra en que nos amen de vuelta. Nuestra soberbia es tal que nos creemos merecedores (incluso exigimos) de que alguien nos dedique su existencia, que nos ame con exclusividad.

Por desgracia, las relaciones intrahumanas son simplemente eso: humanas. Son un bache más en el camino del hombre, un obstáculo que le impide alcanzar la trascendencia. Porque al trascender no hay condicionantes, no hay ajenos que nos limiten. Hay solo uno. Y no me refiero a un único individuo. La trascendencia es la unidad, la fusión de todo, el infinito mismo. En la infinidad las almas se unen, se mezclan, se funden en una sola. Eso es más importante, y más grande que amar. El cuerpo es cuerpo, muere, se pudre y desaparece. Los celos del cuerpo son un capricho, una pérdida de tiempo. Los problemas de pareja nacen del defecto humano más peligroso de todos; la inseguridad. Cuando somos inseguros, somos más hombres que nunca: nos sentimos expuestos porque tememos que algo más grande nos castigue o nos hiera. Llamar “amigo” a un semejante no es dejarlo entrar, es excluirlo. Enseñar a los hijos a que cumplan con los mandatos de los padres es sólo una muestra de poder. La gran meta del hombre no es ser bello, ni amar, ni procrear, ni ejercer una profesión. Todo aquello culmina cuando el cuerpo desaparece. El verdadero desafío del ser humano es trascender: dejar de ser humano. Y mientras continuemos imponiéndonos formas de actuar y responder a nuestro entorno, nuestra humanidad permanecerá vigente y más peligrosa que nunca.

Lo mental es más grande y más poderoso que lo físico.



B.G.J.

sábado, junio 02, 2007

"American Dad": La Nueva Parodia Americana



El grupo de fanáticos de las series animadas para adultos ha crecido en niveles insospechados estos últimos años. Esto gracias a un nicho poblacional nunca explotado con anterioridad. Fox Channel ha sido siempre el canal favorito en este aspecto, debido a su constante renovación de material y variedad de caricaturas; desde los más clásicos, como “Los Simpsons”, hasta las más recientes novedades, como “American Dad”. De hecho, esta última se ha convertido en el nuevo orgullo de la productora, en un nuevo éxito que se suma a su amplia colección. Y es que “American Dad” es la nueva parodia del estilo de vida americano, una serie que se encarga de tocar sin vergüenza algunos temas tan actuales y concretos como la anorexia y la homosexualidad.

El programa trata las aventuras de una familia compuesta por cinco personajes; cada uno retrata satíricamente a los integrantes de una clásica familia norte americana. El hijo menor, tímido y aplicado a sus estudios; se encierra en su pieza a menudo a leer y a revolcarse con su novia gótica. La hija mayor, pretenciosa y rebelde, ajena a todo lo que ocurre en su familia. Su estilo evoca una muy anticuada moda época hippie, con algo de punk y un toque de rock. La madre, un ama de casa trabajadora pero de fuerte carácter y personalidad dominante, es quien lleva los pantalones en el hogar. La mascota, y quizás éste el personaje más insólito; un marciano con pretensiones de villano, que vive con la familia desde que su nave se estrelló en el planeta tierra. Y por último, el personaje que le otorga el ingrediente tragicómico a la serie: el padre, un hombre de treinta y cinco años que siempre viste de traje y quiere estar a la moda. Le aterran las críticas y es capaz de hacer lo que sea para lograr admiración pública. El personaje busca reproducir y ridiculizar el discurso capitalista norte americano a toda costa.

La serie no sólo es entretenida. El humor que utiliza (y a menudo explota) es liviano y sofisticado, se basa en críticas sociales expresadas de una forma irónica y satírica. Esta fórmula podría convertirla pronto en “Los Simpsons” de nuestra generación. Sin embargo, hay que advertir que es explícitamente una serie para adultos. Los temas que toca son en su mayoría demasiado crudos para los niños. Los personajes expresan su sexualidad sin ningún pudor, y la juventud actual es uno de los principales blancos de constantes burlas y humillaciones. Incluso se exponen abiertamente las grietas y falencias existentes en las relaciones intrafamiliares de hoy en día.

Si el espectador es capaz de evaluar la serie desde un criterio ajeno y externo, entonces se divertirá mucho con cada uno de sus capítulos. Resulta una oportunidad para reírnos de nosotros mismos y del mundo en que vivimos, para olvidar las preocupaciones y aquello que nos aflige a diario. Es finalmente, sólo una instancia para relajarse. Como dijo un viejo amigo mío; no hay que ser "tontos graves".



B.G.J.